Con la mira puesta en no dejar huecos en un proceso de perfeccionamiento de las herramientas recaudatorias, la Dirección General de Aduanas (DGA) puso el ojo en el comercio exterior. Por medio de cinco Resoluciones, el organismo dependiente de la AFIP fijó nuevos valores de referencia de exportación y valores criterio de importación de una serie de productos. El fisco busca con estas decisiones evitar la evasión impositiva por medio de maniobras de subfacturación y sobrefacturación, respectivamente. En el marco de esas medidas, Aduanas criticó la gestión que tuvo la DGA durante el macrismo por haber desarticulado esos mecanismos de control.
En el detalle de las Resoluciones, la 5148/2022 fijó valores de referencia FOB para el mosto concentrado en 1,20 dólares el kilogramo con destino de exportación a 42 países. «Argentina es el principal productor del mundo de este insumo industrial» usado principalmente para endulzar bebidas, aclaró la DGA, además de señalar que en 2021 representó exportaciones por 438 millones de dólares.
El organismo dirigido por Silvia Traverso aseguró que «la implementación de precios testigo permitirá evitar maniobras de subfacturación de las ventas al exterior y abordar la competencia desleal de operadores que estén fuera de las reglas».
En paralelo, se actualizaron también los valores de referencia de aceite esencial de limón, «otro producto en el que Argentina es líder global en exportaciones y que se utiliza para la elaboración de perfumes y alimentos», por medio de la Resolución 5152; y para las colas de langostinos exportadas a Europa, Sudamérica, China, Corea, Filipinas e Indonesia, a través de la Resolución 5153.
Asimismo, las resoluciones 5149 y 5150 actualizaron los valores criterio de importación para diversos artículos de bijouterie y juguetes que contengan masa modelar originarias de China y el Sudeste Asiático, entre los que se destacan autos de metal, de plástico y de mesa, ruedas de bicicleta, auriculares, tejidos, dientes artificiales, clavijeros para instrumentos musicales, radiadores para calefacción central y textiles de poliéster.
Una medida desarticulada por el macrismo
«Durante la gestión anterior, la herramienta fue desarticulada, al reducirse en un 20 por ciento la cantidad de productos alcanzados, que pasaron de 24.000 a 19.000», indicó el organismo. Desde fines de 2019 se incorporaron valores de referencia a la carne bovina, leche en polvo, limones y langostinos, entre otros productos, «para evitar maniobras abusivas que se traducen en evasión de impuestos y que afectan el ingreso de divisas».
Los valores de referencia «no se tratan de medidas aisladas, sino que forman parte del abordaje integral a problemáticas que afectan a la industria, el empleo y los precios», señaló la DGA. Al respecto, advirtió que «en diciembre de 2015 había más de 20 productos específicos con valores referenciales, pero el gobierno anterior llevó adelante una paulatina desarticulación de la herramienta hasta que, en noviembre de 2017, derogó la normativa que permitía establecer valores referenciales».
Por último, el organismo remarcó que con la actual gestión «se retomó la utilización de los valores de referencia, que ya fueron instrumentados en complejos de productos como el maní blancheado, ciruelas secas, limas y limones, langostinos, calamares, cueros y pieles, peras, manzanas, ajo, carne de cerdo, tomate perita, arándanos, leche en polvo, cebolla, papa, pasas de uva, corvina y carne bovina».