Un grupo conformado por el referente del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE), Juan Grabois, el diputado nacional Federico Fagioli, abogados, trabajadores de prensa y representantes de organizaciones sociales, realizó este martes una marcha a Lago Escondido para reclamar que el Estado Nacional recupere esas tierras que actualmente son propiedad del magnate británico Joe Lewis.
La Fundación Interactiva para Promover la Cultura del Agua (FIPCA), por su parte, convocó para este martes a una conferencia de prensa para brindar detalles sobre la «marcha por la soberanía al Lago Escondido» que lleva adelante todos los años.
«Queremos comunicarles que en este momento, estamos intentando llegar al Lago Escondido, patrimonio de todas y todos los argentinos pero sólo accesible para algunos serviles al poder real. Las Malvinas son argentinas, el Lago Escondido también», escribió este martes a las 8 de la mañana el referente del MTE en su cuenta de Twitter, donde compartió un comunicado en el que explicó que uno de los objetivos de la movilización es «peticionar al Estado Nacional que impulse una acción de lesividad por la compra ilegal del año 1996 para recuperar esta porción de territorio nacional».
Pasadas las 10, Grabois compartió una fotografía del grupo que realizó la movilización sosteniendo de espaldas al lago una bandera con la leyenda «Las Malvinas son argentinas, el Lago Escondido también». «Ya izamos la bandera en territorio nacional ¡Recuperemos lo nuestro!«, publicó el referente del MTE junto a la imagen.
Comunicado completo
Queremos comunicarles que, en este momento, estamos intentando llegar al Lago Escondido, patrimonio de todas y todos los argentinos pero sólo accesible para algunos privilegiados: los jerarcas del poder judicial, las fuerzas de seguridad, los medios hegemónicos y los políticos serviles al poder real.
El Lago Escondido hoy forma parte de un enclave colonial inglés asentado ilegalmente en zona de seguridad nacional. Hidden Lake, como le llaman el inglés y sus servidores, junto con el inmenso aeropuerto privado de Sierra Grande sobre la costa Atlántica y la Estancia “el Cóndor” sobre el Estrecho de Magallanes, ambos a escasos kilómetros de las Islas Malvinas, son un triángulo estratégico de ocupación británica en territorio argentino.
La situación del Lago Escondido es, además, una de las máximas expresiones de cómo funciona el poder real. El ‘Triángulo de Lewis’ se construyó con tierras malhabidas, violando las leyes de seguridad nacional, apelando a testaferros y documentos falsificados, cerrando los accesos públicos a la costa del Lago Escondido. A pesar de un fallo firme del Superior Tribunal de Justicia de la Provincia de Río Negro que data del 2012 y confirma un fallo de 2002, ni el gobierno provincial ni el nacional ha habiltado un paso que permita al pueblo disfrutar de la maravilla natural que constituye el Lago Escondido. Son veinte años.
Detrás de los muros de este rémora colonial se esconde un enorme proyecto inmobiliario para multimillonarios en el sector llamado “Pampa de Ludden”, al que los vecinos se han opuesto férreamente debido a su enorme impacto ambiental tanto sobre el pueblo como sobre el Área Natural Protegida Río Azul-Lago Escondido. El mega-country de Lewis es otro paraíso para ricos que es un infierno para la gente común y la naturaleza.
Pero el verdadero secreto del Lago Escondido es su función como sede del Estado Paralelo que venimos denunciando; hemos visto como la estancia de Joe Lewis es la cueva donde se urden las conspiraciones en Argentina, se desafían las instituciones democráticas, se escriben los fallos o se planifica cómo incumplirlos; aquí, en territorio entregado al inglés, se reúne el estado mayor del modelo colonial.
Nuestra acción de hoy se enmarca en el concepto de Resistencia No Violenta con el que Gandhi enfrentó el imperialismo inglés en la India. No estamos violando ninguna ley, simplemente ejercemos nuestro derecho constitucional al libre acceso a la costa de los lagos. Los lagos son del pueblo argentino y nosotros somos argentinos que queremos liberar este pedacito de patria de la ocupación ilegal.
Nuestro objetivo directo es lograr el camino público tal cual exige el fallo del Superior Tribunal de Justicia y peticionar al Estado Nacional que impulse una acción de lesividad por la compra ilegal del año 1996 para recuperar esta porción de territorio nacional. También, tan de moda que están las auditorías hoy en día: que se auditen todas las ventas a multinacionales y testaferros de magnates extranjeros en zonas de seguridad nacional.
Del mismo modo, venimos a decir que no hay lugar a ningún proyecto inmobiliario, mega-minero, petrolero o del agronegocio sin el consentimiento del pueblo y el debido respeto a la naturaleza. En la Argentina, el saqueo económico de nuestros bienes comunes va de la mano con la violación flagrante a la voluntad mayoritaria de todos los pueblos que dicen, referéndum tras referéndum, no al extractivismo contaminante, no al glifosato, no al cianuro, no al acaparamiento de tierras.
Esta protesta apunta también a exigir el ejercicio patriótico del poder legítimo y legal que la Constitución otorga al Gobierno electo para desmantelar el Estado Paralelo y poner las cosas en su lugar. No podemos tolerar que se siga imponiendo el 1% por sobre el 99% restante de la población. No podemos tolerar que los fallos se acaten inmediatamente cuando van en contra del pueblo, pero demoren añares cuando tocan los intereses de los privilegiados. No podemos tolerar que en la Argentina se siga concentrando el ingreso y la riqueza sin medidas redistributivas serias. Seguir con esta reiteración de agachadas contra las grandes mayorías bajo falsos argumentos como la «institucionalidad», «honrar las deudas» o la «correlación de fuerzas», es complicidad o falta de patriotismo y coraje.
En estos días de fervor argentino cabe preguntarse:
¿Dónde está el patriotismo en ajustar la inversión social incumpliendo la deuda con la gente mientras se acatan servilmente los mandatos del Fondo Monetario Internacional o el reciente fallo antifederal de una Corte Suprema ilegítima y corrupta?
¿Dónde está el coraje en pagar un plus precio a las exportaciones de soja que nos han salido a los argentinos más de 600 mil millones de pesos mientras se regatea lo más esencial a la mitad de los trabajadores argentinos que ganan por debajo de la línea de pobreza aún estando en blanco?
¿Dónde está el patriotismo cuando se crea un comando unificado para encarcelar a seis mujeres con sus hijos pero no vemos ningún comando unificado haciendo cumplir la sentencia contra el invasor inglés?
¿Cómo puede haber magnates extranjeros como Lewis con cientos de miles de hectáreas mientras nuestros pequeños productores, arrendatarios, comunidades campesinas criollas u originarias, no tienen tierra propia para cultivar? ¿Cómo puede ser cuando hay millones de familias argentinas que no tienen siquiera un terreno para construir su vivienda?
Este proceso de extranjerización de la tierra y los recursos naturales se profundizó tras la anulación que Mauricio Macri realizó de la ley 26.737 de protección al dominio nacional sobre la propiedad, posesión o tenencia de las tierras rurales. La entrega de nuestros bienes estratégicos y la falta de planificación para que nuestra tierra, subsuelo, aguas y minerales -como el litio- sean un factor de desarrollo humano integral y federal, son la expresión de una falta absoluta de patriotismo y el Estado de indefensión del Pueblo.
Hoy, en este acto de reafirmación de la soberanía nacional, venimos a pedirle a nuestros gobernantes locales, provinciales y nacionales que se pongan la celeste y blanca para defender los derechos del pueblo y la patria. Si no, van a seguir poniéndole la alfombra roja a los representantes más serviles del poder real para que vuelvan a la Casa Rosada.
Las Malvinas Son Argentinas
El Lago Escondido También
Marcha del FIPCA
Además de la marcha liderada por Grabois y Fagioli, organizaciones sociales, políticas y gremiales -nucleadas en la Fundación Interactiva para Promover la Cultura del Agua (Fipca)– convocaron para este martes a las 12 a una conferencia de prensa en la sede de la Federación Gráfica Bonaerense para dar detalles sobre la nueva marcha a Lago Escondido que, como otros años, se hará entre enero y febrero próximo para denunciar que el lugar es un «enclave británico» y funciona como «la cueva de un poder mafioso, vinculado al poder económico, judicial y mediático».
Según adelantaron en un comunicado, la nueva movilización -que será la séptima- se realizará entre el 26 de enero y el 14 de febrero próximo y se organizará en diferentes columnas que se congregarán en el lugar.
«Queremos que se cumpla la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de la Provincia de Río Negro y de la Cámara de Apelaciones de Bariloche, que exige habilitar el Camino del paraje Tacuifí por su carácter de acceso público», dice el comunicado, donde también se exige que «se detenga y juzgue a los participantes de la mafia judicial y del grupo Clarín que participaron de la reunión en el Lago Escondido en octubre pasado».
Entre las organizaciones firmantes están La Cámpora, La Federación de Gráficos Bonaerenses (FGB), la CTA Autónoma, la CTA de los Trabajadores, el Movimiento Octubre, la Mesa Coordinadora por la Defensa de la Soberanía Nacional del río Paraná y del Canal Magdalena, Sutap, Causa Nacional, GPS (Grupo por la Soberanía), el Grupo Bolívar, la Corriente Federal de Trabajadores, la CGT Regional zona Norte y el Grupo de Curas Opción por los pobres.