Ejecutivos de Bank of America señalaron que el Gobierno nacional tiene todo preparado para poder abrir el cepo cambiario hacia la mitad de 2024.
En lo que tiene que ver con la economía, el gigante de Wall Street, Bank of America, señaló que el Gobierno se encamina a un probable descenso en el índice de inflación y que tiene todo preparado para poder abrir el cepo cambiario hacia la mitad de 2024.
Ejecutivos visitaron nuestro país y elaboraron un informe llamado «Argentina en Foco”. Firmado por el analista Sebastian Rondeau, este documento remarca la importancia de alcanzar el pacto fiscal con los gobernadores, aunque hace foco en la resistencia popular por las fuertes medidas de ajuste.
“El Banco Central no parece tener apuro por acelerar el tipo de cambio (manteniendo un ajuste mensual del 2% hasta ahora) a pesar de las preocupaciones acerca de la sobrevaluación de la moneda. El BCRA continúa acumulando reservas internacionales, en parte debido a la asignación gradual de importaciones”, plantea el documento.
También aseguran que el Gobierno “tampoco tiene prisa por levantar los controles de capital, esperando un balance del BCRA más limpio (incluida una mayor acumulación de reservas). En nuestra opinión, el mega canje de deuda en pesos completado esta semana allana el camino para levantar los controles de capital (ya que elimina los riesgos de refinanciamiento)”.
Y concluye: “La finalización de la corrección relativa de precios para junio (servicios públicos), también podría abrir espacio para una recalibración de la política de cambio de divisas. Esperamos una aceleración de la devaluación del peso a más tardar a finales de abril y el comienzo del levantamiento de los controles de capital para junio”.
“Los expertos locales esperan que la inflación continúe disminuyendo, probablemente a un solo dígito para junio una vez que se complete el ajuste de precios de los servicios públicos. La recesión es más grande de lo esperado y podría alcanzar una contracción del PIB entre el 4% y el 5%. Exportaciones adicionales por $15 mil millones amortiguan el impacto. La consolidación fiscal ha sido impresionante (apuntando a un ajuste del 5% del PIB), pero hay dudas sobre su sostenibilidad sin leyes”, agregaron.
Sobre el DNU y los consensos, el análisis habla sobre el riesgo económico del plan de Milei y plantea que en Buenos Aires “son menos optimistas sobre las posibilidades de propuestas de privatización y delegación de poderes”.
“Somos moderadamente optimistas sobre las posibilidades de alcanzar un acuerdo fiscal entre el Gobierno y los gobernadores a corto plazo. Esto debería incluir un cambio en la fórmula de pensiones, ingresos fiscales, un régimen de promoción para proyectos de inversión a gran escala y la desregulación de los hidrocarburos”, manifestaron sobre el pacto fiscal.
“Los incentivos para este acuerdo son fuertes dada la necesidad de consolidar el ajuste fiscal y aumentar los ingresos para las provincias. Los riesgos de ejecución siguen siendo grandes en medio de un Congreso dividido y riesgos para el decreto de mega-desregulación”, concluyeron.
Javier Milei culpó a los empresarios por la inflación de alimentos: «Hay que ver si la ven y no quieren»
Javier Milei justificó la decisión de abrir las importaciones para productos de la canasta básica y culpó a los empresarios por la inflación de alimentos: «Hay que ver si la ven y no quieren», expresó. Además, aclaró que cuando se abra el cepo se dará «más competitividad y se podrá corregir la situación».
Durante una entrevista para Radio Con Vos, el Presidente fue consultado sobre la decisión de los empresarios al aumentar los precios de los productos alimenticios en los últimos meses, por arriba de la expectativa de la inflación. A lo que explicó «el accionar de los empresarios, hay que ver sino la ven y no quieren» corregir estos precios.
Tras la reunión del ministro de Economía, Luis Caputo con los supermercadistas, el Gobierno anunció que abrirá las importaciones para productos de la canasta básica, en «pos de poder hacer los precios más competitivos en beneficio de la familia, los consumidores argentinos», explicó en su momento, el vocero presidencial Manuel Adorni.
Esta decisión del Gobierno estará acompañada junto a una «quita de impuestos en esos productos importados«, con el fin de «ayudar a la corrección de precios«, que en las últimas semanas aumentaron «más de lo debido» para poder acelerar la normalización.
Ante esta decisión, Javier Milei añadió que la medida se tomó sobre el «tema de cómo no estaban alineados los precios digamos en los supermercados y demás en términos de las expectativas y promociones, 2×1, 3×2, como un mecanismo para inducir a que corrijan esos precios abrir la economía en lo que tiene que ver con los alimentos que tiene impacto directo sobre la indigencia y la pobreza».
En cuanto al cepo, si bien su meta es abrirlo, por el momento el Gobierno «está siendo prudente», ya que el mandatario aclaró que «no lo van hacer de un día para el otro». Por último, recalcó que «nuestro compromiso en destruir la inflación es innegociable. Tiene el mismo nivel de importancia que el déficit cero».
Cómo será la apertura de las importaciones a los alimentos
- El BCRA reducirá el plazo de pago de importaciones de alimentos, bebidas y productos de limpieza, cuidado e higiene personal: pasarán de un esquema de pago en 4 cuotas a los 30, 60, 90 y 120 días a un plazo de pago en una sola cuota a los 30 días.
- Se determinó suspender, por el plazo de 120 días, el cobro de la percepción de IVA adicional e impuesto a las ganancias a las importaciones de estos productos y de los medicamentos.
- Esta medida alentará la importación de productos de la canasta básica cuyo precio en el mercado local sea superior al precio internacional, lo que contribuirá a una mayor competencia y, en consecuencia, a una caída en la inflación y en el nivel de precio de estos productos.
- Entre los principales productos beneficiados se encuentran: banana, papas, carne de cerdo, café, atún, productos de cacao, insecticidas, shampoos, pañales, entre muchos otros productos.
FUENTE: C5N