Su nombre científico es Ilex paraguariensis, pero en realidad la conocemos como yerba mate. Es originaria de las cuencas de los ríos Paraná, Paraguay y Uruguay, donde crece en estado silvestre como una planta arbustiva o arbórea neotropical. En la actualidad, en Uruguay y Argentina se consume una gran cantidad de mate, pero también llega a otras latitudes, como a Siria, donde la gente lo importa e ingiere.
En los últimos años se ha ido extendiendo la costumbre de esta bebida, que es un estimulante. Incluso, es posiblemente el estimulante más natural que hay por su contenido en cafeína.
Es por eso que, al contener cafeína, uno puede preguntarse: “¿Cuánto mate, es mucho mate?”
El mate es una bebida cuyo único posible efecto dañino es si lo toma muy caliente. Si lo toma continuamente muy caliente, posiblemente le dañe el esófago. Sin embargo, no produce otros daños. Está considerado una bebida muy saludable, tiene antioxidantes, puede ayudar a bajar el colesterol, reduce el apetito. Su sabor amargo se origina en los taninos.
Además del efecto estimulante, el mate cuenta con:
Polifenoles, una clase de fitoquímico de gran poder antioxidante que permite una mejora en las defensas naturales del organismo y que, incluso, lo protegen del daño celular. Incluso, también cuenta con ácido clorogénico, un potente antiinflamatorio.
Minerales, los más destacados son el potasio, esencial para el correcto funcionamiento del corazón, y el magnesio, que colabora con la incorporación de proteínas.
Xantinas, como la cafeína, la teobromina y la teofilina, son compuestos bioactivos que estimulan el sistema nervioso central, promueven la actividad mental y aumentan los niveles de energía y la concentración.
Digestivo: cuando se consume de forma regular, tiene un efecto diurético y medianamente laxante. Es por eso que previene la retención de líquidos y mejora el desarrollo de la función renal, además de colaborar con la eliminación natural de toxinas.
Cardiovascular: quienes lo consumen como bebida diaria pueden presentar una reducción en los valores de colesterol malo (LDL), con lo cual se pueden prevenir enfermedades cardiovasculares.
¿Cuáles son las formas más comunes de consumirlo?
Aunque cada región y cada persona tiene su propia receta para prepararlo, incluso con técnicas que pueden ser consideradas de excelencia, existen tres formas de tomar mate:
Cebado: es la que podría ser considerada como la más tradicional, en la cual se bebe caliente mediante una bombilla colocada en un recipiente denominado mate. Esta “versión” puede ser dulce o amargo. Incluso, puede contener diferentes hierbas.
Cocido: preparado como una infusión de características similares al té en su preparación. Se realiza cuando el agua ha hervido y se filtra mediante coladores o, bien, al usar saquitos que se introducen dentro de una taza con agua caliente.
Tereré: es más común encontrar esta versión en las zonas con temperaturas elevadas, ya que se constituye como una suerte de refresco. Se realiza con agua fría y otras hierbas (como menta y cedrón) y frutas (en especial cítricos).
¿Cuál es el aporte calórico del mate?
Tan solo la yerba mate, es decir la hoja, aporta 75 calorías por cada 100 gramos diluidos en 1 litro de agua. Siendo que en su versión cebada o tereré aporta solo 30 calorías cada 50 gramos de yerba (cantidad promedio). Ahora, cuando se usan endulzantes, esa cifra cambia.
El mate y la cafeína
El contenido de cafeína que uno puede consumir diariamente son 400 miligramos, número que se traduce en 3 o 4 tazas de café. Sin embargo, el equivalente es dos o tres mateadas durante el día.
Tenga en cuenta que si empieza a tener nerviosismo o le cuesta dormir, no olvidemos que contiene cafeína y es un estimulante, la recomendación es que no tome después de las 6 de la tarde.
Recuerde: si usted cuida su cuerpo le va a durar toda la vida, y si no lo cuida también.
El top 5 de los yuyos más ricos para el mate y sus beneficios
Burrito: Es digestivo, se puede utilizar para el mate caliente y el tereré. Su sabor mentolado lo hace ideal para el verano, cuando hace calor y necesitamos un sabor refrescante.
Cedrón: tiene propiedades antisépticas, antiinflamatorias, y sedantes. Se puede incorporar al mate para mejorar la digestión o aliviar molestias luego de un almuerzo o cena abundante. También es un relajante natural y lo toman para conciliar el sueño.
Peperina: Los cordobeses y habitantes de San Luis acostumbran agregarla as sus mates. Es digestiva, estimulante y alivia el malestar general; similar a la menta, aporta a tus mates un toque fresco.
Manzanilla: Es una planta que se cultiva desde tiempos inmemoriales. Se caracteriza por su intenso aroma dulzón que conserva su sabor durante meses. Es un antiinflamatorio, alivia los trastornos digestivos, náuseas, vómitos, pérdida del apetito y gases.
Poleo: Actúa eficazmente ante problemas cardiovasculares y trastornos gastrointestinales, su sabor es fuerte y amargo.