Héctor Romero está en la mira de los investigadores por las contradicciones que detectaron en sus declaraciones, horarios que no concuerdan y testimonios que lo complican
La causa que investiga la desaparición de María Cash tiene un detenido. Se trata de Héctor Romero, el camionero que fue la última persona que vio con vida a la diseñadora, cuyo paradero se desconoce desde el 8 de julio de 2011, cuando deambulaba por una ruta en Salta.
La detención fue ordenada por el Juzgado Federal de Garantías N°2 de Salta, a cargo de Mariela Giménez. El sospechoso será indagado mañana, miércoles.
El día de la desaparición, Romero “levantó” en un camión Mercedes Benz blanco con acoplado y la leyenda “Catita” a la joven que hacía dedo a un costado de la Ruta Nacional N°34, en la rotonda del cruce de Torzalito, General Güemes. El chofer dijo que llevó hasta un sector conocido como la Difunta Correa, en el Paraje Palomitas, y luego siguió camino a Joaquín V. González.
Sin embargo, el hombre quedó en la mira de los investigadores por las contradicciones que detectaron en sus declaraciones, horarios que no concuerdan y testimonios que lo complican.
Los detectives notaron que el sospechoso no prestó colaboración. Incluso, en su momento, llegaron a él a través del testimonio de otro testigo que vio a María hacer dedo y subir al transporte. Los datos que brindó, permitieron identificar al chofer.
Luego, notaron contradicciones a lo largo de las cinco declaraciones que prestó en la causa sobre el lugar exacto en el que dejó a la diseñadora. Ahora bien, los investigadores constataron que “es casi imposible realizar la maniobra descrita por el camionero en ese lugar”. “No hay tiempo de frenado para un camión con la carga que llevaba”, establecieron.
Al mismo tiempo, a los investigadores les llamó la atención que en sus testimoniales, el camionero, describió a la desaparecida “desde abajo hacia arriba”. No recordó cómo estaba vestida en su parte superior ni su rostro, “porque estaba despeinada y el pelo suelto le tapaba la cara”. Según el resto de los implicados y las cámaras de seguridad del peaje, María tenía el cabello recogido.