Aún así, el conflicto continúa y el titular de UTA, César González deslizó: «el viernes no sé».
La Unión Tranviarios del Automotor (UTA) realizó una asamblea multitudinaria en el horario del quite de colaboración que llevaron a cabo este miércoles entre las 9 y las 11 de la mañana (a la tarde la protesta se repitió el reclamo). Los choferes plantearon posibles nuevas medidas para el viernes.
“Mañana tenemos reuniones con el cuerpo de delegados donde se va a analizar la situación y, si no tenemos ninguna respuesta, la medida se va a profundizar para el viernes”, advirtió César González, secretario general del gremio.
“Mañana se van a prestar normalmente los servicios; el viernes, no sé”, aclaró.
El representante gremial habló a los trabajadores y les dijo: “No queremos que ninguno de los que pertenecemos a la actividad de transporte tengamos problemas. Somos 3.500 trabajadores y con el grupo familiar, somos 20.000”.
Además, pidió paciencia porque “a veces cuando se toman las medidas de acción directa, no se las toma en el momento” por trámites administrativos. Y lanzó: “Desde que estoy en el gremio, nunca tuvimos despedidos o suspendidos; los compañeros suspendidos fueron 300 y se levantó la medida”.
Se refirió a las quejas de los usuarios y dijo que las unidades que se retiraron antes del horario eran unidades de refuerzo que cumplían con su tiempo de trabajo.
“Hay servicios que cumplen las ocho horas y otros que trabajan en las horas pico. Los que cortaban a las 8:30 eran refuerzos, pero el resto de los coches cumplieron sin ningún inconveniente el horario y no dejaron a ningún pasajero en la calle”, aseguró González.
(Foto: LV )