La devaluación y la inflación encarecen Bienes Personales

Entre los bienes gravados habrá dos rubros patrimoniales que tendrán una incidencia importante en el resultado final del impuesto: la tenencia de moneda extranjera (en general dólares o euros) y de inmuebles urbanos, no destinados a casa habitación.

El Impuesto sobre los Bienes Personales es un tributo instantáneo que grava la situación patrimonial al 31 de diciembre de cada año y contempla mecanismos de actualización, valores de mercado y de cotización a los fines de determinar la base imponible sobre la cual se deberá pagar.

Este esquema, en un contexto inflacionario genera un incremento de la citada base de imposición por el solo hecho de poseer tales bienes, sin contemplar el cómputo de pasivos.

Por supuesto que contempla un mínimo no imponible (para 2023 es $ 27.377.408,28) tributándose sobre el excedente en función de una escala progresiva. Si se tienen bienes en el exterior existe una escala de alícuotas diferenciales, también progresiva, que se aplica según se repatrien o no los activos financieros del exterior, por al menos el 5% del total.

Hasta aquí una reseña a grandes rasgos de los alcances del gravamen.

Bienes Personales: ¿sobre qué se paga?

Entre los bienes gravados habrá dos rubros patrimoniales que tendrán una incidencia importante en el resultado final del impuesto: la tenencia de moneda extranjera (en general dólares o euros) y de inmuebles urbanos, no destinados a casa habitación ya que de ser así se encuentran exentos si su valuación es igual o inferior a $ 136.887.041,42 para 2023.

Al 31/12/22, la cotización del dólar tipo comprador se ubicaba en $ 176,96 y el euro en $ 189,26. El mismo tipo de cotización que habrá que utilizar al 31/12/23 para valuar la tenencia de moneda extranjera, trepa a $ 805,45 por dólar y $ 889,38 por cada euro, lo que resulta 355% de incremento para el dólar y un 370% para el euro.

En cuanto a los inmuebles, hasta que la Oficina Federal de Valuaciones de Inmuebles (O.Fe.V.I.) no dicte el procedimiento y la metodología que deben utilizar las jurisdicciones para determinar sus valuaciones, se dispuso en la ley de Bienes Personales un mecanismo especial para valuar los inmuebles en el país, que consiste en que la base imponible no puede ser inferior a la base imponible para determinar los impuestos inmobiliarios (valuación fiscal) vigente al 31/12/2017 ajustada por un coeficiente (IPC) que para el período fiscal 2022 fue de 9,092 y que para el ejercicio 2023 es de 28,312 de cuya comparación resulta un aumento de 211%.

De todo ello resulta que ambos activos en cabeza de las personas humanas y sucesiones indivisas deberán soportar un incremento significativo de la base imponible para el período fiscal 2023, que vencerá a medidos de junio.

Los cambios previstos en la ley ómnibus que se trata en el Congreso no se refieren a los supuestos comentados pero, de aprobarse, tendrá modificaciones en torno a los bienes del exterior.

Fuente: https://www.ambito.com/economia/la-devaluacion-y-la-inflacion-encarecen-bienes-personales-n5923670