Diversos indicadores marcan un proceso de deterioro en la dinámica del crecimiento industrial, advierte el último informe trimestral de la Unión Industrial Argentina (UIA). En las cuatro mediciones centrales que establece el documento, correspondientes a producción, ventas internas, exportaciones y empleo, hay un mayor porcentaje de empresas que operan en negativo respecto de las que siguen avanzando.
Sin embargo, la encuesta mensual de empleo del Ministerio de Trabajo continuó registrando en enero una leve mejora de la plantilla industrial, al tiempo que la CAME también midió una pequeña suba en enero del 0,3 por ciento frente a diciembre y del 1,2 por ciento en febrero respecto de enero. Para el Indec, la industria mejoró en enero un 0,7 por ciento mensual, el mejor valor desde junio de 2022.
Menor dinamismo
«El crecimiento que venía manifestando la actividad industrial comenzó a mostrar una desaceleración hacia fines de 2022, en un contexto de mayores restricciones a la importación de insumos, elevados niveles de inflación y suba de tasas de interés, sumado a una mayor base de comparación. Los primeros datos de 2023 indican que esta tendencia se mantuvo y que se podría acentuar«, indica la UIA.
El informe identificó que el 45,2 por ciento de las empresas encuestadas registraron en enero una caída de producción respecto del cuarto trimestre de 2022. Se trata del valor negativo más alto de la serie que arranca en enero del 2021. Sólo el 15,6 por ciento de las firmas incrementaron su producción. Si bien enero es un período de paradas técnicas, los datos están por debajo del promedio para el mes.
En el terreno de las ventas internas, el 45,8 por ciento de las empresas relevadas registraron una caída en relación al cuarto trimestre del 2022. «Se trata de un desmejoramiento considerable, ya que dicho porcentaje había sido de 35,5 por ciento en octubre de 2022 y de 28,9 por ciento en enero de 2022″, agrega el informe. En tanto, el 17 por ciento de las firmas tuvo mejoras en las ventas locales. El menor dinamismo se observó también para las exportaciones, con un 34,3 por ciento de las empresas con caídas respecto del cuarto trimestre de 2022.
Para Salvador Femenía, directivo de la CAME, que agrupa a pequeñas y medianas empresas, «la industria pyme se está viendo afectada por el aumento de los costos, la demora en las entregas por parte de proveedores y de materias primas y los problemas para importar insumos y repuestos». «De todas maneras, en febrero registramos un aumento del 1,2 por ciento mensual, con buen desempeño en maderas y muebles, alimentos y bebidas a partir de la demanda de la temporada veraniega y metal y maquinarias por mayor demanda del sector automotriz. En cambio, textil e indumentaria no levanta», agrega Femenía.
Empleo
En el caso del empleo industrial, la porción de empresas que registran caídas respecto del trimestre anterior se ubica en el 17,8 por ciento, por arriba del 13,9 por ciento que anotó mejoras. A su vez, el porcentaje de empresas que redujo su plantilla está por arriba de enero de 2022 (10,3 por ciento) y de enero de 2021 (13,9 por ciento). En tanto, la porción de empresas que sumó personal fue más baja que la de enero de 2022 (23 por ciento) y de enero de 2021 (17,3 por ciento).
De acuerdo a los datos últimos oficiales, en enero el empleo privado registrado en la industria manufacturera creció un 0,2 por ciento respecto de diciembre. En doce meses, el alza es del 2,2 por ciento. El dato proviene de la encuesta mensual del Ministerio de Trabajo, que continúa mostrando un desempeño positivo del empleo.
De cara a los próximos meses, el 31 por ciento de las empresas espera que su situación particular mejore, mientras que, por debajo de ese número, el 26,5 por ciento es optimista respecto de su sector. En tanto, sólo el 20,3 por ciento de los empresarios consultados espera que la situación económica del país mejore.