La oficina de prensa de la Embajada de Estados Unidos confirmó que «no hubo conversaciones» para establecer una reunión entre vicepresidenta, Cristina Kirchner, y la jefa del Comando Sur de los Estados Unidos, Laura Richardson, en su actual visita a la Argentina. De esta manera, la embajada norteamericana validó la desmentida que la vicepresidenta realizó a través de sus redes sociales por una nota del diario Clarín en la que sostenía que desde el Gobierno se intentó concretar un encuentro y «la respuesta no fue positiva».
Cristina Kirchner acompañó la desmentida vía Twitter con una captura de la nota fechada el 17 de abril. Tras el tuit de la vicepresidenta, Clarín incorporó en la nota periodística el descargo, pero mantuvo el título y el encabezado de la nota en la que se sostiene que «altas fuentes en Buenos Aires» -sin aclarar cuales- «confirmaron» que la generala Richardson rechazó una reunión con la ex presidenta, como la que tuvieron en abril de 2022.
Ahora, la declaración oficial de la Embajada de Estados Unidos ofrecida a este diario termina de desacreditar las «altas fuentes» al sostener que: «La generala Richardson y la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner mantuvieron una productiva reunión el 26 de abril de 2022. No hubo conversaciones sobre una reunión con la vicepresidenta Fernández de Kirchner durante la visita más reciente de la generala Richardson a Argentina, del 16 al 18 de abril de este año”«.
«Este año, ni nosotros hemos solicitado una reunión con la generala Richardson, ni la embajada lo ha hecho con nosotros. Una vez más y como siempre… Clarín miente», escribió la vicepresidenta en su cuenta oficial de Twitter. La también expresidenta se reunió con la jefa del Comando Sur de los Estados Unidos el 26 de abril del año pasado en su despacho del Senado, en un encuentro en el que también estuvo el embajador estadounidense, Marc Stanley, quien había gestionado el encuentro, según contó Kirchner.
El encuentro había sido pautado con anterioridad pero llamó la atención debido a que el Comando Sur de Estados Unidos siempre resulta un órgano incómodo por los gobiernos latinoamericanos debido a su capacidad de control y despliegue militar en el continente. El rol del comando y la tarea de Richardson quedó bajo la mirada de la agenda pública tras la declaraciones que la general hizo en enero pasado para un encuentro organizado por un think thank vinculado a la OTAN.
En el video, Richardson apunta «¿Por qué es importante América latina?» como antesala para hablalr de que entre Argentina, Chile y Bolivia cuentan con el «60 por ciento del litio del mundo se encuentra en ese triángulo», que «necesario hoy en día para la tecnología». Dos meses después, ante Comisión de Defensa del Senado estadounidense, Richardson expuso la preocupación norteamericana: «Beijing continúa expandiendo su influencia económica, diplomática, tecnológica, informativa y militaren América Latina y el Caribe».
Los declarados intereses norteamericanos sobre la región y la disputa por la explotación de esos recursos con China tiñieron la nueva visita de la jefa del Comando Sur. Por eso, la agenda publicada por Estados Unidos sobre la nueva visita de la generala se centró en temas estrictamente de defensa.
La reunión de más alto rango que mantuvo Richardson ocurrió el lunes con el ministro de Defensa, Jorge Taiana. El ministro contó oficialmente que el encuentro estuvo centrado en temas de defensa: «Los acuerdos bilaterales vigentes, la jerarquización de las FFAA, el equipamiento militar y la prioridad estratégica que la Argentina le asigna al Atlántico Sur».
En la previa de la llegada de Richardson a Buenos Aires, y a menos de un mesa de la visita del presidente Alberto Fernández a la Casa Blanca, el tema de la relación con China continuó merodeando la agenda bilateral. El viernes pasado, el canciller Santiago Cafiero recibió en el Palacio San Martín a la subsecretaria de Estado estadounidense, Wendy Sherman, para avanzar en la agenda que Fernández trazó con su par Joe Biden, pero el gigante asiático metió la cola en la mesa.
«China puede invertir en este país, nosotros no le pedimos a los países que elijan entre Estados Unidos o China, aunque por supuesto que creemos que nosotros tenemos productos superiores. Pero tienen que ser cautos y saber lo que están comprando”, advirtió Sherman durante su conferencia de prensa en la Embajada de los Estados Unidos. En este contexto de fuertes presiones cruzadas, la Embajada norteamericana salió a confirmar que no existió ningún desplante ni pedido de reunión de Richardson con la vicepresidenta.